Reseña "Princesa de Cenizas" de Laura Sebastian

martes, 1 de diciembre de 2020

Ficha del libro

Nombre: Princesa de Cenizas

Saga: 1/3

Autora: Laura Sebastian

Género: Fantasía

Sinopsis: Theodosia tenía tan solo seis años cuando los kalovaxianos invadieron su país y asesinaron a su madre, la Reina de la Llama y la Furia, delante de sus propios ojos. En aquel momento, la joven princesa lo perdió todo. Incluso su nombre.

Con el nuevo nombre de Thora y el ridículo apodo de «princesa de Cenizas», Theodosia ha vivido diez años prisionera en su propio palacio sufriendo los maltratos y las humillaciones del káiser. Pero cuando el dictador la obliga a ejecutar a la única persona que podría haberla salvado de su pesadilla, Theodosia decide resurgir de las cenizas. Su astucia es más poderosa que cualquier espada. Y un reino no se gana siempre en el campo de batalla.

Durante diez años la Princesa de Cenizas ha visto su tierra saqueada y a su pueblo esclavizado. Ha llegado el momento de ponerle fin a esta opresión.

Mi opinión (CONTIENE SPOILERS):

Esta es la historia de una niña a la que le asesinaron a su madre de forma sangrienta justo delante de ella. Pero no termina ahí, también asesinan a sus amigos, conocidos, y cualquier atisbo de familia que podría haber tenido. Una niña de seis años que despierta un día siendo cautiva de un Káiser que robó su pueblo, en el mismo mundo, mismo castillo donde se crio, pero completamente distinto.

Thora es "la princesa de Cenizas", humillada y torturada durante 10 años, viviendo a merced de un tirano a sabiendas de que aquel pueblo que antes había amado, se encontraba ahora muriendo lentamente. Sus compatriotas esclavizados, sin derechos ni libertades, perseguidos, odiados, racializados, barbarizados, y confinados a una vida de pobreza y hambre. Thora es consciente de esto pero desde que era tan solo una niña, la golpeaban a latigazos y ejercían una violencia psicológica en el día a día para despojarla de quien alguna vez fue. Su mantra cuando comienza el libro es "No enfureceré al káiser y así me mantendré con vida".

Se puede notar lo deprimida que se encuentra en el principio del libro, incluso a veces me preguntaba cómo hacía para levantarse de la cama por las mañanas cuando su vida se me tornaba insoportable. Realmente ejercían una violencia psicológica constantemente, incluso su "hermana de corazón", Crescentia, la torturaba sin darse cuenta al hablar indiferentemente de la tiranía del káiser, todo el tiempo le hacía comentarios a Thora que ella deseaba responder defendiendo a su pueblo pero no podía debido a que su vida pendía de un hilo, cualquier atisbo de Theodosia, la reina de Ástrae, era castigado horriblemente incluso pudiendo llegar a la muerte.

"De repente, vuelvo a tener seis años y estoy viendo cómo asesina a mi madre. Tengo siete años, y él tiene el látigo en la mano mientras el káiser me saca mi nombre de la mente a la fuerza. Tengo ocho años, nueve, diez, y él está ante mí con un cubo de agua helada, con un atizador para el fuego, con cualquier cosa que el káiser le ordene que use para sacarme a Theodosia de dentro, para que solo quede Thora."

En todo el libro se puede ver los problemas psicológicos de Thora, debido a todo lo que sufrió tiene unos grandes problemas de confianza, no solo con los demás sino también con ella misma, el personaje de "Thora" se le impregnó tanto debido a la tortura que le ejercieron para lograrlo, que muchas veces no confía en sí misma, no sabe que decisión tomar porque se le entrecruzan quién la hicieron ser, quien su pueblo espera que sea, y quien es ella realmente.

"Ya no me acuerdo de quién soy. Los límites de mi persona se desdibujan. ThoraTheoTheodosia."

"Esta gente asesinó a decenas de miles de astreanos, y tengo que sonreír con coquetería y saludar con la mano, como si no los odiara con cada poro de mi piel."

La "Thora" que repite su mantra de no enojar al káiser, aquella Thora sumisa que crearon se despierta el día que la obligan a asesinar a su propio padre. Su mejor amiga incluso hablaba de aquel suceso horrible como un "juicio", y ella tuvo que sonreír y fingir que todo era normal. Pero no lo era. Theodosia comenzó a resurgir. En ese momento se dio cuenta que no podía seguir viviendo aquella vida que llevaba desde hace diez años, estaba totalmente enojada y con sed de venganza por todo lo que su pueblo sufría a manos de los kalovaxianos mientras que a ninguno de ellos parecía importarles, ni siquiera a Crescentia, quien a pesar de haber sido la única que estuvo a su lado, seguía siendo una kalovaxia hija del theyn, cómplice y responsable de lo que le sucedía al pueblo astreano.

Crescentia fue un personaje que no pudo caerme bien a lo largo del libro, lo intenté, intenté

comprenderla fuera de una mirada etnocéntrica, siendo que creció y se crio con las convecciones kalovaxianas era comprensible que considerara a su pueblo digno y a los astreanos débiles e insignificantes. Pero era la mejor amiga de Thora, sabía por lo que ella pasaba día a día y no tenía un mínimo de tacto a la hora de hablar de "La Conquista" y de los esclavos, no pude comprender como no podía darse cuenta que no era apropiado hablar de esa forma a su "hermana de corazón" siendo que era su familia, sus amigos, sus conocidos, su pueblo, quien era esclavizado, asesinado y confinado a una vida de miseria. Aparte de que Crescentia era inteligente, amaba leer e incluso se muestra leyendo una historia sobre un reino de tiranía, no me pudo entrar en la cabeza que no se diera cuenta de las injusticias del káiser. Thora la describe como una buena persona, dice que la ama porque no es cruel, pero ser egoísta, manipuladora e indiferente (cómplice), en mi opinión también es ser cruel. La evolución de este personaje, sin embargo, fue muy interesante para la trama, la relación entre Cress y Thora, desde el principio parecía irse dirigiendo hacia un lugar oscuro, con todas las contradicciones que esta amistad conllevaba, el final del libro me hace sospechar que Crescentia será una enemiga importante para el resto de la historia.

"—He oído lo del juicio —dice en voz baja, con la frente arrugada—. ¿Estás bien?
«Juicio» es una curiosa forma de llamarlo. Nadie ha presentado ningún alegato, no ha habido jurado, ni juez. Ha sido un asesinato que yo misma he ejecutado."

"—Era un traidor, Thora. —Su voz suena amable, pero contiene una advertencia —. La ley de traiciones es muy clara, y la decretaron los dioses mismos. El káiser no tenía elección, y tú tampoco. 
«No es mi ley», pienso, «ni son mis dioses»."

"—Podríamos cambiar las cosas. No solo para mí, también para los demás. [...]
—Los demás, ¿quiénes?
—Los astreanos —respondo despacio, observando la expresión de su rostro—. Los esclavos.
—Eso no se puede cambiar —responde en voz baja.
—Pero podríamos —insisto, mientras la desesperación empieza a invadirme—. El káiser es un hombre cruel. Lo sabes.
—Es el káiser, y puede ser tan cruel como quiera.
—Si tú fueses la kaiserina… Si… Si te casaras con Søren. Podrías cambiar las cosas. La gente te amaría, se pondrían de tu parte, y no de parte del káiser. Podríais arrebatarle el país fácilmente.
—Eso es traición —replica entre dientes—. Para, Thora."

"...no importa lo que quiera decirme a mí misma sobre la lealtad, la amistad o el deber, la verdad es terriblemente simple: puse a Cress por delante de mi pueblo y ella puso su ambición por delante de mí."

En cuanto a la protagonista, me encantó, no solo demostró ser fuerte, sino que demostró ser real, con todos sus defectos y problemas, mostrándose tan rota como estaba, Laura Sebastian logró recalcar bien la historia de Theodosia, mostrando las secuelas de todos los traumas que vivió y seguía viviendo, con todas sus complejidades humanas. Muchos pensarán (leí algunos comentarios al respecto) que Thora era débil e indecisa, que no vivió todas las injusticias que su pueblo sufría, que se rindió fácilmente, en lo personal, me gusta muchísimo la psicología, y habiendo estudiado un poco de ella, no me pienso capaz de juzgar a Thora, siendo que desde que tenía tan solo seis años, fue golpeada con latigazos y a pesar de no haber sufrido la inanición, sufrió violencia simbólica, psicológica y fue duramente castigada cada vez que algún astreano se sublevaba. Sí, al principio del libro se encuentra rota, pero poco a poco comienza a fortalecerse, a enfrentarse a sus miedos, el arco de personaje de Theodesia es notable, su mantra al final predica ser libre.

"La esperanza que vive dentro de mí todavía no se ha extinguido. Se está muriendo, sí; de ella no quedan más que rescoldos. Pero he visto fuegos que se han avivado con menos."

"Siempre me he sentido avergonzada por la piel roja y nudosa de mi espalda. En ella se puede trazar la historia de las rebeliones de Ástrea. Cada vez que los piratas astreanos hundían uno de los barcos del káiser, cada vez que una de las minas intentaba llevar a cabo una revolución, cada vez que un esclavo escupía a su amo: todo ello me lo han grabado en la piel. Las cicatrices son feas y monstruosas, un recordatorio constante de lo que soy."

En un principio no me agrado la idea de un triángulo amoroso, pero la verdad es que al menos en este libro, no tuvimos mucho complejo con esto, ya que no hubo muchos sentimientos en este primer libro, lo cual fue excelente porque me dejó con más intriga para los siguientes libros sobre los dos chicos que le interesan a Thora, que a pesar de ser personajes principales, no tenemos mucho de ellos en Princesa de Cenizas. No era el tema principal del libro, así que no se volvió pesado de esa manera en la que molesta al lector por ser un conflicto tonto y constante en la trama. No hay un instalove, a Theodosia comienza a gustarle Soren a medida que pasa mas tiempo con él, ya que demuestra ser todo lo contrario a lo que se podría pensar del príncipe de los kalovaxianos, no se parece para nada al kaiser, Soren es noble, sentimental y aborrece totalmente a su padre. Pero a pesar de ello, Thora no se enamora de él en este libro, lo cual es comprensible, teniendo en cuenta por todo lo que esta pasando en esos momentos, ella está más enfocada en salvar a su pueblo y escapar de aquel lugar que la atormenta todos los días. Y en cuanto a Blaise, de él sabemos todavía menos en este libro, Theodosia se encuentra atraída hacia él ya que es el único quien la conoce desde antes de ser Thora, que la conoció en sus mejores días cuando podía ser ella libremente, y también comparten una causa en común, Ástrea. Pero no pasan suficientes momentos juntos, ya que siempre están enfocados en su causa, no comparten muchos momentos personales, pero están ahí para apoyarse, y sentí que Blaise realmente la entendía, a diferencia de Soren que solo conoce a la Thora que ella quería que conociera.

Me gustó mucho como llevó a los personajes de este libro Laura Sebastián, todos tienen su propia historia que explica muchas actitudes y rasgos de personalidad, no es esa clase de autora que tan solo describe a los personajes pero no los muestra o explica, para nada, además de que las historias de estos personajes son todas interesantes, la de la madre de Soren fue muy iluminadora para entender a diversos personajes, no solo a la kaiserina sino también al kaiser y a su hijo. También las historias de Heron y Artemisa, mostraron un poco de lo que era la vida de los astreanos fuera del castillo, e incluso la historia de Elpis, con su trágico final. Todos los personajes tuvieron una excelente evolución y explicación que servió para entender mejor lo que sucedía en Ástrea.

La trama principal puede sonar cliché, un reino colonizado y una princesa que quiere recuperarlo, pero la verdad es que me gustó mucho como se desenvolvió la trama, Laura Sebastián logro mostrar los horrores de la colonización, sus personajes eran jóvenes y tal vez por ello no pudo notarse la profundidad de lo que relataba, pero en lo personal me pareció muy chocante mucho de lo que se mostraba en el libro, todos los violentos mecanismos de colonización tales como la explotación y esclavización de los nativos. Incluso el proceso de barbarización que suele hacerse para justificar las acciones, los kalovaxianos debían sentirse mejores que aquellos a quienes dominaban, para poder explicar sus propias acciones, los astreanos eran inferiores, llamados barbaros y débiles en reiteradas veces, tal como la instauración del racismo con la colonización de América y África, construyendo identidades como negro o indio para justificar la colonialidad del poder. Las historias de los personajes que mencioné antes, fueron muy importante para esta parte de la trama, ya que la protagonista era prisionera en la corte y no estaba muy enterada de la amplitud del genocidio de su pueblo, y fueron sus Sombras y aliados astreanos quienes le contaron de manera personal los horrores que estaban sucediendo, a pesar de que Thora sospechaba y podía imaginarse lo que sucedía, la magnitud del hecho le cayó en cuenta con la introducción de estos personajes, avivando la chispa que ya se había encendido en la protagonista.

"Mientras yo participaba en los jueguecitos del káiser, murieron ochenta mil astreanos. Cada vez que el látigo me azotaba la piel y yo maldecía mi país y las personas que intentaban salvarlo, ellos estaban siendo masacrados. Mientras yo bailaba y chismorreaba con Cress, ellos se volvían locos en las minas. Mientras yo me daba festines en la mesa de mi enemigo, ellos se morían de hambre."

"Ochenta mil personas. Es una cifra inconmensurable. Ochenta mil madres, padres, niños. Ochenta mil guerreros y artistas y granjeros y mercaderes y maestros, ochenta mil tumbas sin nombre. Ochenta mil astreanos que murieron esperando que alguien los salvase."

Este primer libro fue muy introductorio a lo que será la trama de esta trilogía, y me quedé con muchas de ganas de saber más de aquellos personajes que todavía no tenían su momento, como Blaise, Soren y lo que pasará con Crescentia luego de aquel final. Sobre todo me dejó con ganas de saber cuales serán los siguientes pasos en la revolución de Ástrea, siendo que ahora ya no se encuentran en el castillo y han secuestrado al prinz. No ha sido mi mejor lectura del año, siendo que, a pesar de algunos detalles como el sistema político de Ástrea junto con sus dioses fueron originales e interesantes, la trama en sí no era nada del otro mundo, pero definitivamente se encuentra entre los libros que me han encantado, la recomiendo a todos aquellos a quienes les gustan las historias de reinos, venganza y política con su toque fantasioso.

"—Lo que hacemos para sobrevivir no nos define. No pedimos disculpas por ello —asevera en voz baja, sin dejar de mirarme a los ojos—. Quizá te hayan roto, pero eso solo te ha convertido en un arma más afilada. Y es hora de atacar."